La marcha de Luis Suárez del Barcelona supone no sólo una gran pérdida futbolística sino personal para el capitán del equipo, Leo Messi.
El argentino y el uruguayo son grandes amigos, y su relación trasciende lo meramente profesional. Sus familias, sus hijos y sus esposas son uña y carne y han sido muchos años de éxitos y alegrías juntos, que ahora se rompe con la marcha del charrúa al Atlético de Madrid.
Messi se ha despedido de su socio en una carta en instagram, en la que no se muerde la lengua. El argentino apunta directamente a la directiva culé y a Josep María Bartomeu por cómo ha gestionado la transición del nuevo equipo, en la que Suárez ha sido una de las víctimas:
«Ya me venia haciendo la idea pero hoy entré al vestuario y me cayó la ficha de verdad. Que difícil va a ser no seguir compartiendo el día a día con vos, tanto en las canchas como afuera. Los vamos a extrañar muchísimo. Fueron muchos años, muchos mates, comidas, cenas… Muchas cosas que nunca se van a olvidar, todos los días juntos.