El Real Madrid se impuso 1-3 al Barcelona en en el Clásico menos convencional de los últimos años, sin público y mucho más temprano en el calendario de lo acostumbrado.
El arranque del partido fue frenético. Tanto, que Fede Valverde tardó menos de cinco minutos en adelantar al Real Madrid, tras superar a una zaga blaugrana que no supo leer su desmarque y que se plantó delante de Neto -Ter Stegen ha sido la gran ausencia culé, lesionado- para hacer el 1-0. El Barça reaccionó al instante: Jordi Alba le ganó la carrera a un dócil Nacho, puso el balón al área y Ansu Fati no perdonó ante Courtois. Apenas se habían cumplido 10 minutos de encuentro.
El partido se frenó ligeramente conforme avanzaron hacia el descanso. Messi y Benzema probaron a bocajarro a Courtois y Neto respectivamente, en dos grandes ocasiones claras y casi únicas en la primera mitad.