La salida de Leo Messi del FC Barcelona será traumática, pase lo que pase, pero el argentino quiere suavizarla todo lo que pueda. Por eso, ha solicitado a sus abogados que negocien una marcha pactada con la directiva, ya que no quiere cerrar una etapa tan importante de su vida con tan malas sensaciones.
El objetivo de Messi, sin embargo, sigue siendo el mismo: irse del club blaugrana y, si puede ser, gratis al Manchester City. Reunirse con Guardiola es un sueño y para ello necesita la carta de libertad o un precio que no sean los 700 millones de la rescisión de su contrato. Es por ello que la cláusula liberatoria, que él dice que está vigente, se convierte en clave.
La respuesta del conjunto culé no ha tardado en llegar: están dispuestos a reunirse con los representantes legales de Messi… pero sólo si quiere renovar. No están dispuestos a venderle por menos de esos 700 millones, y están seguros de que pueden hacer recapacitar al futbolista. «O es para renovar o no hay nada que negociar», apuntan fuentes blaugrana a ‘Marca’.